La noche del 26 de junio de 2025 se transformó en un manifiesto sonoro en la Plaza de España. Dentro del Icónica Santalucía Sevilla Fest 2025, uno de los festivales más importantes de España con más de 230.000 asistentes confirmados en esta edición, Residente ofreció un concierto que fue mucho más que música: fue un acto político, un viaje íntimo y un canto colectivo. El escenario patrimonial sevillano, iluminado con una elegancia sobria y respetuosa, recibió a miles de asistentes con una mezcla de emoción y reivindicación, consolidando su lugar como capital de los grandes conciertos en la Plaza de España y del festival Sevilla 2025.

Desde primera hora, el ambiente se sentía cargado de expectativas. Gorras y abanicos se mezclaban entre un público diverso, con predominancia urbana y hiphopera, reunido para escuchar a uno de los grandes del rap en español. El calor andaluz se mitigaba con la brisa nocturna y la promesa de un espectáculo único. Icónica Sevilla Fest, con su Sello de Sostenibilidad y su compromiso con la conservación del entorno, volvió a demostrar que cultura y respeto patrimonial pueden ir de la mano.

🎇 Un arranque íntimo y cargado de tensión en la Plaza de España

El reloj marcaba las 22:28 cuando las luces se atenuaron para dar inicio al ritual. Un solo de contrabajo envolvió la plaza en un silencio expectante, casi reverencial. Fue un arranque poco convencional: en lugar del impacto inmediato, Residente optó por la creación de una atmósfera contenida, como si invitara al público a un susurro antes del grito.

Y entonces emergió su voz: rasgada, poderosa y cercana. “¿Cómo estamos, Sevilla? Hasta el tope”, saludó con energía, rompiendo las barreras entre artista y audiencia. Enseguida desató un primer medley que encendió la plaza con Baile de los Pobres, Nadie como Tú y Cumbia, hiladas con precisión quirúrgica, calentando la caldera emocional de los más de 8.000 asistentes. Cada verso era un latigazo social y cada riff, un llamado a la acción.

🗣️ Rap con causa: política, crítica y pura humanidad

Residente nunca ha sido solo un músico: es un narrador feroz. Entre canciones, intercalaba discursos directos sobre la educación pública, la situación en Palestina y la dignidad de América Latina. “Eduquen a los más pequeños, háblenles de esto, no les oculten lo que pasa”, pidió antes de interpretar Guerra. Sobre el escenario ondeaban banderas palestinas, y el artista recogió una para dejarla desplegada como emblema de resistencia.

“América no es solo Estados Unidos. América somos todos”, proclamó antes de This Is Not America, en uno de los momentos más celebrados y coreados de la noche. Su crítica al imperialismo estadounidense no fue abstracta: estuvo cargada de ejemplos y de urgencia, con Sevilla como cómplice. Y con Latinoamérica, en versión extensa y emotiva, recordó su compromiso con los pueblos del sur, conectando con la memoria iberoamericana de la Plaza de España, ese foro arquitectónico que nació para simbolizar la unión entre España y sus antiguas colonias.

🎶 Momentos íntimos, humor y una banda de lujo

No todo fue denuncia. El Residente más humano también se mostró con generosidad. Confesó entre bromas que estaba enfermo, pero que el medicamento y la energía del público lo mantenían en pie. Presentó a su banda con cariño, detallando sus orígenes de Alemania, Brooklyn, Puerto Rico o Grecia, mostrando la diversidad que late en su música.

Con Muerte en Hawaii y La Vuelta al Mundo, ofreció respiros caribeños, narrando anécdotas de composición como las horas de lancha hasta Cuba para escribir un verso. El público respondió con carcajadas cuando se quejó de los mosquitos sevillanos —“Murió en Sevilla, por un mosquito”—, humanizando la distancia entre estrella y fan.

Pero el gran momento emocional llegó con René, una confesión en forma de canción que interpretó con los ojos cerrados, como si cada palabra fuera una herida reabierta. Las luces cálidas iluminaban rostros emocionados en la plaza, muchos con lágrimas, mientras Residente concluía con la voz quebrada y un agradecimiento sincero.

🤝 Invitados especiales y final apoteósico

La sorpresa más celebrada llegó con Zatu, de SFDK, que apareció para interpretar con Residente su colaboración Yo no sé, pero sé. El público estalló en ovaciones: Sevilla recibiendo a uno de sus hijos pródigos sobre el mismo escenario donde celebró los 30 años de SFDK apenas un año antes. La química entre ambos artistas fue palpable, entre barras afiladas y sonrisas cómplices.

El setlist siguió con un repaso a clásicos como Chulin Culin Chunfly, encendiendo la nostalgia colectiva, y culminó en un canto de unidad y homenaje con El Futuro es Nuestro, que Residente dedicó a un amigo fallecido. El broche final fue Portarnos Mal, que transformó la Plaza de España en un carnaval de saltos y manos al aire. “¡Viva Palestina libre! ¡Viva Puerto Rico libre!”, fueron sus últimas palabras antes de desaparecer entre luces y aplausos.

🌙 Kaze y el cierre rapero de una noche intensa

Pero la noche no terminó ahí. Tras el despliegue de Residente, fue el turno de Kaze en Sevilla, quien ofreció un show más hardcore y con menor público, pero extremadamente entregado. Su propuesta, con beats duros y letras viscerales, resonó entre los que se quedaron hasta bien entrada la madrugada. Luces histriónicas y columnas de humo subrayaron su estilo más agresivo, contrastando con la emotividad del set anterior.

Zatu volvió a aparecer para compartir con Kaze el tema Agua pasá, demostrando la complicidad y el respeto mutuo entre las generaciones del rap español. Fue un cierre perfecto para una noche que celebró la palabra con causa, el ritmo como herramienta de denuncia y la Plaza de España como templo de la música urbana.

🌍 Icónica Sevilla Fest: un escaparate de rap consciente y cultura viva

El Icónica Santalucía Sevilla Fest 2025 sigue consolidándose como el gran festival urbano y cultural del sur de Europa. Más de 230.000 asistentes ya han confirmado su éxito rotundo, mientras su compromiso con la sostenibilidad y la protección del patrimonio lo convierten en modelo de gestión responsable. Con citas futuras tan dispares como Ozuna, Cypress Hill o Jean-Michel Jarre, Icónica demuestra su vocación de diversidad, pero la noche del 26 de junio dejó claro que su esencia también late en el rap con conciencia.

Residente y Kaze demostraron que la música en directo puede ser catártica y transformadora, y que Sevilla ya no solo es la capital de la Semana Santa o la Feria de Abril, sino también del mejor rap en español y de los festivales más potentes del país. Si quieres seguir viviendo cada momento del Icónica Santalucía Sevilla Fest 2025, no te pierdas el resto de nuestras coberturas exclusivas.